Creación de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE)

El 13 de diciembre de 1988 fue publicado en el Diario Oficial de la Federación el decreto mediante el cual se creó la Comisión Nacional del Deporte (CONADE), siendo éste un órgano desconcentrado de la Secretaría de Educación Pública. Sus funciones son desarrollar e implantar políticas de Estado que fomenten la incorporación masiva de la población en actividades físicas, recreativas y deportivas que fortalezcan su desarrollo social y humano y que impulsen la integración de una cultura física sólida. Asimismo, la CONADE promueve que se oriente la utilización del recurso presupuestal no como un mero gasto, sino como una inversión, e insta a que se promueva una cultura de igualdad de oportunidades para lograr la participación y excelencia del pueblo mexicano en el deporte[1].

En 1990 se promulgó la Ley de Estímulo y Fomento de Deporte, la cual constituyó la primera en materia deportiva en México, situando a la Comisión Nacional del Deporte como su entidad rectora, pero con carácter de organismo desconcentrado de la Secretaría de Educación Pública[2].

Las actividades desarrolladas por la CONADE han cimentado las bases sólidas para el desarrollo del deporte mexicano. De acuerdo con el decreto publicado el 24 de febrero de 2003 en el Diario Oficial de la Federación, se creó la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte como un organismo público descentralizado de la Administración Pública Federal, la cual, desde ese momento y hasta nuestros días, es la conductora de la política nacional en materia de cultura física y deporte con personalidad jurídica, patrimonio propio y domicilio en la Ciudad de México[3].

Debido a que el principal compromiso de la CONADE hacia la sociedad mexicana es lograr una población más sana y competitiva en todos los ámbitos a través de la práctica de la Cultura Física y el Deporte, ésta trabaja de la mano con jóvenes, niños y adultos para lograr afianzar el talento deportivo. El deporte posee distintas dimensiones y su provecho estriba en resultados médicos, políticos, psicológicos, de fomento del compañerismo, como elemento embajador y también es un excelente motivador para el bienestar social[4].

Derivado de la reforma constitucional en materia de derechos humanos, el 12 de octubre de 2011 se publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto por el que se adiciona un párrafo décimo al artículo 4o. y se reformó la fracción XXIX-J del artículo 73 de la Constitución. Esta adición reconoce el derecho que toda persona tiene a la cultura física y a la práctica del deporte, estableciendo que le corresponde al Estado su promoción, fomento y estímulo conforme a las leyes en la materia. El derecho al deporte es interdependiente; es decir, guarda estrechas relaciones con otros derechos como lo son los derechos a la vida, a la salud, a la integridad personal, a la educación, al mínimo vital y, en última instancia, al enaltecimiento de la dignidad de las personas.

Asimismo, el acuerdo más reciente, publicado también en el Diario Oficial de la Federación, es el número 21/10/22, referente a la actualización de los “criterios y montos de asignación de beca económica deportiva para entrenadores, equipo multidisciplinario y personal técnico[5].