Asunto
“Durante su prisión, permaneció con grilletes en los pies. Era necesario sacarlo en hombros fuera del calabozo para que tomase un poco de sol. Sus propiedades fueron confiscadas y, para procurarse recursos, empleaba el tiempo en fabricar cigarreras de cartón, que adornaba con papeles de colores. Las monedas que obtenía las utilizaba en comprar chocolate y tabaco. Así permaneció hasta el restablecimiento de la Constitución de Cádiz, que hizo posible la liberación de los presos políticos.”
 
David Guerrero Flores
“Vida de un Bravo” INEHRM
 
 

Caudillo de la Independencia de México, Nicolás Bravo Rueda nace el 10 de septiembre de 1786 en la hacienda de Chichiualco, propiedad familiar cercana a Chilpancingo, en Guerrero. Insurgente destacado por su espíritu solidario y humanista, también destaca como político, llegando a ser presidente de México en tres ocasiones. Muere el 22 de abril de 1854, en el mismo lugar familiar donde nació[1].

De familia terrateniente criolla, hijo de Leonardo Bravo y Gertrudis Rueda, Nicolás Bravo creció en un medio donde era común la crítica a la Corona Española y sus excesivas medidas administrativas hacia los novohispanos del siglo XIX, así como los planteamientos acerca de la necesidad de liberarse de esas cargas. Tanto era así que antes de su involucramiento en la causa independentista, su padre se negó en 1810 a formar una compañía de auxiliares realistas con sus hijos y hermanos, viéndose obligados a escapar de las autoridades virreinales y refugiarse en las cuevas de Michapa. En 1811, tropas virreinales intentaron aprehenderlos, pero la guerrilla insurgente de Hermenegildo Galeana los defendió, integrándose a la lucha toda la familia. Mientras el padre construía material bélico, expedía pasaportes y administraba, los hijos se destacaron en el campo de batalla. Nicolás Bravo participó en diversos encuentros de costa a costa, desde Guerrero hasta Veracruz, bajo las órdenes superiores de José María Morelos y Pavón[2].

Estuvo presente en la toma de Oaxaca y en el sitio de Cuautla y Acapulco. En agosto de 1812, dio ejemplo de su generosidad al perdonar la vida y otorgar la libertad a trescientos soldados realistas, quienes habían sido derrotados por sus tropas en San Agustín del Palmar, cerca del puerto de Veracruz. La acción se realizó cuando el virrey Francisco Xavier Venegas y Saavedra hizo prisionero a Leonardo Bravo, e intento “negociar” con Nicolás una rendición a cambio del indulto a su padre. Éste había sido capturado en la hacienda de San Gabriel, y trasladado a la capital para ser ejecutado. Ante la digna lección de Nicolás, la cobardía de Venegas se impuso ejerciendo sobre Leonardo Bravo una muerte ejemplar: fue asesinado mediante garrote vil en la Calzada del Ejido (hoy, Avenida Juárez) [3].

Nicolás Bravo, fue sin duda un hombre que en su época defendió la dignidad humana, entendida, no solamente como el fundamento de todos los derechos humanos, sino que, además, concebida como el objeto de un derecho específico. Que hoy en día, ha sido establecido expresamente tanto en el artículo 1° de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, como, en instrumentos internacionales, como, por ejemplo, en la Convención Americana sobre Derechos Humanos, también llamada Pacto de San José, en la cual en su artículo 11° menciona toda persona tiene derecho al respeto de su honra y al reconocimiento de su dignidad, y en la Declaración sobre el Genoma Humano y los Derechos Humanos, un derecho a que se reconozca, se proteja y no se viole, la dignidad inherente a toda persona. Es decir, el derecho a la dignidad. Siguiendo con la historia, entre 1813 y 1814, resguardó a la Junta de Zitácuaro y a los miembros del Congreso de Chilpancingo, apoyando a los constituyentes de Apatzingán. A la caída de Morelos, en 1815, Nicolás Bravo se mantuvo como defensor de la Junta de Jaujilla, hasta 1817. Ese año fue hecho prisionero por los realistas, permaneciendo como preso político hasta el 13 de octubre de 1820, cuando pudo salir libre bajo fianza a consecuencia de la amnistía decretada por Fernando VII, presionado a su vez por las leyes liberales de la Constitución de Cádiz. De inmediato se reintegró a la lucha insurgente, sumándose al Plan de Iguala. El Congreso Constituyente de 1821 lo nombró miembro de la Regencia, pero al instalarse Agustín de Iturbide como emperador, Bravo retomó la lucha hasta ver instaurada la República. Fue vicepresidente durante el gobierno de Guadalupe Victoria, y tres veces presidente de México: la primera, como interino, duró días, en julio de 1839; la segunda, como sustituto, duró unos meses (octubre de 1842 a mayo de 1843); la tercera, también interinato, abarcó de julio a agosto de 1846. En ninguna ocasión tuvo la intención de quedarse en el poder, su objetivo fue siempre fortalecer la posición Ejecutiva y reorganizar al gobierno, erradicando cualquier señal de autoritarismo o despotismo. Nicolás Bravo también participó en 1833 en la campaña contra los texanos independentistas, y en 1846 destacó por la defensa de los departamentos de Puebla, Veracruz, Oaxaca y Tabasco ante la invasión estadounidense, teniendo siempre en cuenta la independencia de México y el derecho a la revolución, el cual, podemos encontrar su fundamento en el artículo 2° de la Declaración de los Derechos del Hombre y el Ciudadano[4] de 1789, al establecer el derecho a resistir a la opresión, misma idea que se encuentra en el artículo 4°de la Constitución de Apatzingán[5].

Constitución que se basó en las francesas de 1793 y 1795[6].

Por otro lado, en 1847, tras encabezar la heroica defensa del Castillo de Chapultepec, fue hecho prisionero. Cuando Santa Anna lo acusó de esconderse y ser un traidor, Bravo solicitó ser juzgado para poder salvar públicamente su dignidad y honor, invocando con ello, un derecho fundamental que encontramos, tanto en el artículo 14° de nuestra Constitución Política mexicana[7], como en el 8.1 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos[8].

El derecho al debido proceso. La ruptura entre Antonio López de Santa Anna y Nicolás Bravo se dio a raíz de esto. Al iniciarse la década de 1850 se retiró, cansado, a su hacienda natal, Chichihualco, donde murió el 22 de abril de 1854, precediendo por sólo tres horas a su esposa Antonina Guevara, también ilustre combatiente. Se había unido a la revolución de Ayutla. Nada ha podido comprobar la historia, pero desde entonces corrieron los rumores de que tras sus fallecimientos estuvo la mano de Antonio López de Santa Anna[9], quien ordenó su envenenamiento. Nicolás Bravo fue declarado Benemérito de la Patria. Sus restos reposan en la Columna de la Independencia, en la Ciudad de México. El aniversario de su muerte es luto oficial en su estado natal, Guerrero.


[1] http://guerrero.gob.mx/articulos/nicolas-bravo-rueda-1786-1854/
[2] https://www.lifeder.com/leonardo-bravo
[3] https://www.biografiasyvidas.com/biografia/b/bravo_nicolas.htm
[4] Artículo 2° Declaración de los Derechos del Hombre y el Ciudadano: La finalidad de cualquier asociación política es la protección de los derechos naturales e imprescriptibles del Hombre. Tales derechos son la libertad, la propiedad, la seguridad y la resistencia a la opresión.
[5] Art. 4° Constitución de Apatzingán: Como el gobierno no se instituye para honra o interés particular de ninguna familia, de ningún hombre ni clase de hombres; sino para la protección y seguridad general de todos los ciudadanos, unidos voluntariamente en sociedad, éstos tienen derecho incontestable a establecer el gobierno que más les convenga, alterarlo, modificarlo, y abolirlo totalmente, cuando su felicidad lo requiera.
[6] https://www.corteidh.or.cr/tablas/r23948.pdf
[7] Artículo 14 Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos: Nadie podrá ser privado de la libertad o de sus propiedades, posesiones o derechos, sino mediante juicio seguido ante los tribunales previamente establecidos, en el que se cumplan las formalidades esenciales del procedimiento y conforme a las Leyes expedidas con anterioridad al hecho.
[8] Artículo 8.1 Convención Americana sobre Derechos Humanos
[9] https://www.memoriapoliticademexico.org/Biografias/BRN86.html