Nace Camilo Arriaga
“La figura de Camilo Arriaga adquiere proporción heroica al ser uno de los precursores intelectuales de la Revolución mexicana. Tal y como escribe el historiador James D. Cockcroft, su oposición al régimen de Díaz dio pauta a los subsecuentes movimientos políticos que desencadenarían la lucha armada de 1910l”.
 
Rafael Hernández Ángeles
Investigador del INEHRM
 

CamiloArriaga nació el 10 de noviembre de 1862 en San Luis Potosí. Fue hijo de Carlota Ramos Aguirre y Benigno Arriaga. Por el lado materno, tuvo parentesco con Miguel Ramos Arizpe, diputado que participó en la elaboración de la Constitución de 1824. Por el lado paterno, su abuelo fue Camilo Epifanio, hermano de Ponciano Arriaga; éste último fue diputado constituyente en 1857 y personaje de gran trascendencia nacional por su labor legislativa en la defensa de las garantías individuales. Su padre acompañó al presidente Benito Juárez en su peregrinar por el norte del país. Este fue el entorno liberal donde nació y en el que se desarrolló[1].

En cuanto a sus estudios, ingresó en 1875 a la Escuela Nacional Preparatoria. 5 años después, ingresó a la Escuela Nacional de Ingenieros para aprender sobre la explotación de minas y colaborar con el negocio familiar. También participó en manifestaciones estudiantiles contra la reforma monetaria, la cual pretendía sustituir las monedas de plata por níquel, lo que habría afectado los negocios de su familia. Al final, no se llevó a cabo la reforma por la presión de la protesta popular durante el periodo de presidente Manuel González (1880-1884).

El 17 de enero de 1887 recibió el título de ingeniero, por lo que su padre, un año después, consiguió que el general Porfirio Díaz convenciera a Carlos Díez Gutiérrez, gobernador de San Luis Potosí, de que lo nombrara diputado a la Legislatura Local. Lamentablemente, el 21 de febrero de 1890, su padre murió siendo senador de la República. Como gesto de consuelo, Porfirio Díaz, quien apreciaba a su padre, nombró a Camilo Arriaga diputado federal hasta 1898[2].

No obstante, durante la crisis de la plata (1892-1895), el gobierno de Díaz no otorgó una respuesta favorable a los dueños de las minas plateras; por el contrario, las nuevas concesiones de explotación del subsuelo fueron entregadas a empresas extranjeras. Por lo tanto, en 1898, Camilo Arriaga encabezó la protesta liberal en la Cámara junto con otros diputados, lo cual provocó que fueran separados de sus curules. Por primera vez en su vida, Arriaga experimentó la dureza del régimen intolerante de Porfirio Díaz[3].

La precaria situación de vida de la mayoría de la población, el autoritarismo junto con la falta de apertura democrática y libertad de expresión originaron múltiples movimientos opositores. En consecuencia, se difundió un periodismo crítico encabezado por los hermanos Ricardo y Jesús Flores Magón en el periódico Regeneración. En esa línea temática encontramos El Hijo del Ahuizote, dirigido por Daniel Cabrera; El Diario del Hogar, fundado por Filomeno Mata; y El Colmillo Público, editado por Paulino Martínez. Las publicaciones de los diarios no solo denunciaban las injusticias del régimen de Díaz, sino también divulgaban ideas liberales, socialistas, anarquistas y en defensa de los derechos de la población. Camilo Arriaga, quien había estudiado los textos de Marx, Engels y autores anarquistas como Kropotkin, Proudhon y Bakunin, coincidía con la ideología de los opositores.

A finales de agosto de 1900, Arriaga convocó una propuesta para reorganizar el Partido Liberal. Así que se reunió con Antonio Díaz Soto y Gama dirigente del Comité Liberal de estudiantes; el periodista Juan Sarabia y, posteriormente, con los hermanos Flores Magón, entre otros personajes, para fundar el Club Liberal Ponciano Arriaga. El objetivo era retomar las banderas del liberalismo de la época de la Reforma para contrarrestar la influencia política y económica del clero. La iniciativa aglutinó a diversos sectores de la sociedad potosina, entre ellos profesores, militares, oficiales de las guerras de Reforma y un amplio sector estudiantil. Camilo formó a muchos de esos jóvenes que posteriormente serían protagonistas en el movimiento revolucionario, pues organizaba círculos de estudio de textos socialistas y anarquistas en su biblioteca personal promoviendo que se replicaran esos esfuerzos y organizaciones a nivel nacional.

En octubre de 1900, Camilo Arriaga, presidente del Club Ponciano Arriaga, envió un documento oficial a la Secretaría de Gobernación denunciando al Colegio de Damas del Sagrado Corazón instalado desde 1886 por sus actividades inconstitucionales establecidas en la Constitución de 1857. Además, el Club difundió sus acciones a través de e su órgano de prensa Renacimiento, a cargo de Juan Sarabia. Asimismo, los hermanos Magón apoyaban las actividades del Club.

No obstante, fue hasta finales de 1900 que se adhirieron totalmente cuando Antonio Díaz Soto y Gama y el Comité Liberal de Estudiantes de San Luis Potosí invitaron a Ricardo Flores Magón a representarlos en el Congreso Liberal. El 5 de febrero de 1901 el Club convocó al Primer Congreso Liberal con la intención de reestructurar el Partido Liberal reivindicando la Constitución de 1857. El evento creó expectativas para solucionar un problema específico: la influencia de la Iglesia Católica en México.

La propuesta de Arriaga fue innovadora para su época y la reunión de los clubes en una confederación dio al movimiento un carácter de frente político organizado[4]. Las resoluciones buscaban desarrollar una política ciudadana activa: establecer bibliotecas, realizar conferencias, celebrar festividades cívicas y sostener escuelas. También se exaltaban a las instituciones liberales y el restablecimiento de la honradez política en los funcionarios públicos.

El 23 de febrero de 1903 Arriaga lanzó su último manifiesto. Al interior del Club se debatió la decisión de participar en la elección presidencial con un candidato para combatir la reelección de Díaz. Arriaga y Soto y Gama consideraron que la participación electoral era un proceso lento y posterior a un trabajo arduo de educación, aspecto crucial que tal vez provocó la ruptura con Ricardo Flores Magón, quien era creyente de un método más radical y combativo. En ambos casos fueron reprimidos, por lo cual emigraron a los Estados Unidos, donde continuaron su crítica a la dictadura y sembrando las raíces de la revolución mexicana[5].

En 1908, Arriaga regresó a San Luis Potosí, pero en Puebla, encontró el apoyo de jóvenes civiles y militares para organizar un complot contra el dictador, pero fracasó. Si bien fue encarcelado, más adelante logró la libertad cuando los revolucionarios tomaron Ciudad Juárez, suceso que provocó la renuncia de Porfirio Díaz y la firma del Tratado de Ciudad Juárez[6].

En sus luchas políticas fundó varios periódicos: El Renacimiento, El Porvenir y El Heraldo de México. Más adelante, externó su posición en contra del nazismo y de los fascismos. Camilo Arriaga falleció el 26 de junio de 1945 en la Ciudad de México, dejando un gran legado ideológico, de lucha y de organización, por lo cual es considerado uno de los precursores importantes de la Revolución Mexicana[7].


[1] https://bit.ly/3LZCn7y
[2] https://bit.ly/3riNu1E
[3]Ibid. 
[4] https://bit.ly/3LY06ov
[5] https://bit.ly/3C1QdkS
[6] https://bit.ly/3riMJ8X
[7] https://bit.ly/2Qz4WLt

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