
Lizbeth Castillo Farjat
Historiadora
El 5 de junio de 1952, mientras los henriquistas se encontraban en Juchitán, Oaxaca, en campaña presidencial, Juan Solís y Pánfilo Natera, ayudantes de Miguel Henríquez Guzmán, fueron atacados por cinco policías, como parte de una serie de violentos atentados cuyo fin era acabar con la opción de la dignidad y la honestidad que la candidatura de Henríquez significaba.
Miguel Henríquez Guzmán había nacido en Ciudad Porfirio Díaz, hoy Piedras Negras, Coahuila, el 4 de agosto de 1898. Se había destacado durante la Revolución Mexicana, siendo escolta de Francisco I. Madero durante la Decena Trágica. Hombre de integridad y conciencia, en 1951 fue electo candidato presidencial por parte de la Federación de Partidos del Pueblo Mexicano (FPPM), eje político social contra el corrupto y autoritario régimen anti obrero de Miguel Alemán Valdés[1].
El descontento era mucho, pero el PRI no pensaba dejarse vencer y recurrió a todo para atemorizar a sus enemigos en campaña. En ese ambiente, el 19 de agosto de 1951 se inició formalmente la gira electoral de Henríquez Guzmán, en la ciudad de Colima. En el transcurso de los diez meses siguientes los henriquistas recorrieron todo el país y radicalizaron el tono oposicionista con miras a obtener el triunfo en las urnas. Buscaban revindicar al movimiento revolucionario, era la suya una candidatura revolucionara[2].
Una de sus grandes promesas de campaña fue asegurar que se “acabaría inmediatamente con el hambre” combatiendo el alza de precios y los monopolios” de igual forma Henríquez aseguraba que “El progreso de México es nulo si los mexicanos carecen de lo indispensable; primero es comer, vestir y vivir desahogadamente; los demás bienes vendrán por añadidura, y que, por tanto, había que acabar con los monopolios que explotan a los consumidores"[3].
Miguel Henríquez habló de mujeres y de indígenas. Propuso el derecho al voto femenino desde el inicio de su campaña, como respuesta al trabajo de las feministas de los años treinta. Se refirió a las mujeres en términos de igualdad con los hombres, quizás lo que le ganó el apoyo de valiosas feministas que estarían con él durante la campaña. En el caso de los indígenas, Henríquez los mencionó como una parte del país que vivía en considerable atraso[4].
Los atentados contra los miembros del FPPM no cesaron, como muestran los hechos del 23 de septiembre, en Tlacoltepec, Puebla, el gobernador Rafael Ávila Camacho ordenó parar el convoy de quince camiones con campesinos henriquistas que iban hacia un mitin. Cuando los líderes intentaron argumentar, comenzaron disparos, con saldo de cinco muertos y varios heridos. Éste es sólo un ejemplo entre muchos más, todos denunciados en el periódico del FPPM, Heraldo del Pueblo[5]. La violencia fue común durante esa sucesión presidencial.
Sin embargo, los hechos del 5 de junio de 1952 en Juchitán, Oaxaca, también tuvieron que ver con la historia local, una historia de permanente confrontación de grupos ante los derechos de la tierra. En esta coyuntura, en el estado acababa de implantarse una reforma fiscal, cuyas consecuencias fueron el descontento popular y las constantes manifestaciones y confrontaciones no carentes de violencia en la capital oaxaqueña. Las autoridades locales decidieron responsabilizar de esto a los henriquistas y a los comunistas. En un principio, el colectivo de Henríquez pospuso su recorrido hasta junio.
Juan Solís y Pánfilo Natera, el célebre revolucionario zacatecano, estaban entre los encargados de la organización de la campaña local. Cinco policías quemaron la propaganda política henriquista, y dispararon sobre los dos organizadores cuando se opusieron y defendieron. A Solís, lo mataron. Natera resultó herido, y fue hospitalizado. La campaña en Oaxaca no consiguió recuperar terreno después de esto, pero continuó por todo el país pese a la violencia en contra.
[1] Microsoft Word - 1er. hoja tesis.doc (colsan.edu.mx)
[2] http://www.scielo.org.mx/pdf/desacatos/n1/n1a10.pdf
[3] http://revistas.unam.mx/index.php/rep/article/viewFile/60442/53333
[4] https://www.estudioshistoricos.inah.gob.mx/revistaHistorias/wp-content/uploads/historias_22_137-160.pdf
[5]https://biblio.colsan.edu.mx/tesis/CastilloFarjatLizbeth.pdf