Decenio Internacional de las Ciencias Oceánicas para el Desarrollo Sostenible

El 5 de diciembre de 2017 la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) proclamó ―mediante su resolución A/RES/72/73― el Decenio de las Ciencias Oceánicas para el Desarrollo Sostenible de 2021 a 2030 con el propósito de establecer un marco común capaz de garantizar que las ciencias oceánicas apoyen plenamente los esfuerzos de los países por alcanzar los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible .[1]

En el contexto de este Decenio, el océano se considera parte del sistema de la Tierra en su conjunto y se extiende desde la costa hasta alta mar y desde la superficie del océano hasta las profundidades marinas. Asimismo, el océano es el mayor ecosistema de nuestro planeta y es el encargado de regular el clima, almacenar el carbono, producir oxígeno y nutrir a una diversidad biológica inimaginable. También es directamente garante de nuestro bienestar a través del alimento, los minerales, los recursos energéticos y los servicios culturales y recreativos que nos proporciona.

El término “ciencias oceánicas” abarca disciplinas de las ciencias naturales y sociales, incluidos, entre otros, temas interdisciplinarios, la tecnología y las infraestructuras donde se sustentan las ciencias oceánicas, así como la aplicación de éstas en beneficio de la sociedad, incluida la transferencia y las aplicaciones de conocimientos en regiones que no cuentan con capacidad científica y la relación entre la ciencia y las políticas, por un lado, y con la innovación, por otro. [2]

Para que el Decenio tenga éxito son necesarias las contribuciones de muchos actores, entre los cuales se incluyen científicos, responsables de políticas, sociedad civil, patrocinadores y miembros del sector privado. A su vez, estos diferentes grupos se beneficiarán de las siguientes maneras: [3]

• CIENCIAS OCEÁNICAS Y TECNOLOGÍA
  Contribución: Los científicos aumentarán sus conocimientos y desarrollarán nuevas tecnologías en línea con las prioridades en materia de desarrollo sostenible. Beneficio: El Decenio brindará a los oceanógrafos la oportunidad de desarrollar enfoques multidisciplinarios, mostrar el valor de su trabajo a la sociedad.
• CIENCIAS OCEÁNICAS Y TECNOLOGÍA
  Contribución: Los científicos aumentarán sus conocimientos y desarrollarán nuevas tecnologías en línea con las prioridades en materia de desarrollo sostenible. Beneficio: El Decenio brindará a los oceanógrafos la oportunidad de desarrollar enfoques multidisciplinarios, mostrar el valor de su trabajo a la sociedad.
• POBLACIÓN
  Contribuciones: Los científicos contribuirán a los objetivos del Decenio a través de la recopilación de datos, el intercambio de información y la movilización comunitaria.
  Beneficios: Las comunidades de todo el mundo se beneficiarán directamente gracias a una mejor gestión de los recursos costeros, a la reducción de peligros naturales relacionados con el océano y a una mejor calidad de vida.

Hoy día, debido a las vicisitudes suscitadas por la pandemia por el COVID-19, se ha puesto en relieve la importancia de la ciencia y el conocimiento para la adopción de decisiones y de medidas políticas. El mundo se está adaptando a una nueva normalidad; mientras tanto, los océanos tendrán que desempeñar un papel central en los esfuerzos de recuperación tras la pandemia. En el año 2010 la economía oceánica generó más de 30 millones de empleos directos de tiempo completo y, antes de la pandemia, se había calculado que la producción económica a partir de los océanos alcanzaría para 2030 los 3 billones de dólares estadounidenses. Esto quizá no se logre; por ello, la iniciativa del Decenio pretende frenar los efectos negativos de las actividades humanas sobre los océanos con el objetivo de velar por que las generaciones futuras tengan algo más que simples recuerdos de aquellos recursos que una vez fueron preciosos. [4]