António Guterres
Secretario General de las Naciones
L a Asamblea General de las Naciones Unidas mediante su resolución A/ RES/73/1296 designó el 22 de agosto Día Internacional de Conmemoración de las Víctimas de Actos de Violencia Motivados por la Religión o las Creencias, resolución que condena la violencia y los actos de terrorismo dirigidos a individuos pertenecientes a minorías religiosas [1].
La propuesta surgió debido a los incidentes discriminatorios a nivel internacional relacionados con la religión. Por esta razón, debemos comprender que la libertad de religión, creencias, de opinión, de expresión junto con el derecho de reunión pacífica y asociación son interdependientes y desempeñan un papel clave para combatir la intolerancia y la discriminación basadas en distintos credos.[2]
De acuerdo con el informe del Centro de Investigaciones Pew (2019), durante la década de 2007 a 2017, las restricciones gubernamentales a la religión, entre ellas políticas y acciones de funcionarios estatales que restringen las creencias y prácticas, crecieron notablemente en todo el mundo. De la misma manera, las hostilidades sociales relacionadas con la religión, incluida la violencia y el acoso de particulares, organizaciones o grupos, también aumentó desde 2007 el número de países donde las personas experimentan altos niveles de hostilidades relacionadas con la religión.[3]
Por otro lado, en el contexto de la pandemia provocado por el COVID-19 se observan teorías conspiratorias y la búsqueda de chivos expiatorios entre comunidades caracterizadas por su religión, lo que provoca entre un sector de la sociedad que incremente el odio religioso; que constituye incitación a la discriminación, la hostilidad o la violencia. Esa circunstancia es signo de alerta temprana de ataques agresivos y otras formas de abuso y violación de los derechos humanos[4].
Respecto al tema António Guterres, secretario general de las Naciones Unidas, puntualizó lo siguiente:
“Los Estados tienen la responsabilidad primordial de prohibir e impedir la discriminación y la violencia y de proteger los derechos humanos de las minorías religiosas y garantizar que los autores de los delitos de ese tipo rindan cuentas por ellos. Al mismo tiempo, la comunidad internacional debe hacer más para apoyar a las víctimas de esos actos atroces, así como a aquellos que trabajan para combatir las causas profundas de la intolerancia y el odio”.[5]
[1] https://undocs.org/es/A/RES/73/296
[2] https://www.un.org/es/observances/religious-based-violence-victims-day
[3] https://www.otroscruces.org/dia-internacional-en-conmemoracion-de-las-victimas-de-actos-de-violencia-basados-en-la-religion-o-la-creencia/
[4] https://www.consilium.europa.eu/es/press/press-releases/2020/08/21/international-day-commemorating-the-victims-of-acts-of-violence-based-on-religion-or-belief-declaration-by-the-high-representative-on-behalf-of-the-european-union/
[5] https://www.un.org/es/observances/religious-based-violence-victims-day/messages




