Desde la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) lamentamos profundamente los comentarios y la desinformación presentados en el programa televisivo “De Largo Aliento” conducido por Ud. el pasado jueves 13 de junio del presente año. Estos comentarios reflejan no sólo un sesgo tendencioso en el manejo de datos sino una grave distorsión de la realidad respecto al trabajo en materia de derechos humanos que se ha llevado a cabo en esta CNDH desde el inicio de la actual gestión.
En respuesta al reciente artículo de opinión del magistrado del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Felipe de la Mata Pizaña, publicado en colaboración con el portal de noticias “La Silla Rota” bajo el título “¿La CNDH puede intervenir en la elección?”, así como al indebido rechazo por parte de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de las Controversias Constitucionales promovidas por esta Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), al ordenar "dejar sin efecto" el primer y segundo "Informe sobre violencia política para la protección y defensa del derecho a la democracia", esta Comisión Nacional cree pertinente realizar las siguientes precisiones y posicionamientos:
En el marco de su 34 aniversario, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) reafirma y consolida su transformación como una auténtica defensoría del pueblo de cara al momento inédito en la historia mexicana, especialmente propicio para renovar en las estructuras institucionales y culturales el significado de la protección y defensa de los derechos humanos, esta vez, de toda la población y de las grandes mayorías, de aquellos sectores que durante décadas fueron marginados por el giro económico neoliberal, la simulación institucional y de la democracia “sin adjetivos” que precarizaron y expusieron a las violaciones sistemáticas de sus derechos más fundamentales y les negaron una vida digna.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) expresa su profunda preocupación por las expresiones y discursos de odio que se han intensificado esta semana a raíz de los resultados de las elecciones del 2 de junio. Los mensajes, ampliamente difundidos en medios de comunicación y redes sociales, corresponden, en nuestro Escalómetro de Violencia Política, a los números 4. Discriminación (por género, condición física, económica, ideológica y/o origen étnico) y 10. Discursos de odio.
Desde el día de ayer, y a unas horas de iniciada la llamada veda electoral que impone el artículo 251 de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, las redes sociales se han visto inundadas de mensajes y noticias falsas que buscan, entre otras cosas, desinformar y desalentar la participación ciudadana en la jornada electoral que se llevará a cabo el domingo 2 de junio.
Ante la información difundida este 27 de mayo por el medio digital Animal Político y Artículo 19, en la que se asegura que esta Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) vulneró “los derechos a la verdad y a la información pública de la población”, relacionados con la presunta censura de la Recomendación 26/2006, sobre el caso Pasta de Conchos, la CNDH hace las siguientes aclaraciones:
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) se suma a la exigencia que los más de 90 colectivos agrupados en el Movimiento por Nuestros Desaparecidos en México (MNDM) hacen a los partidos políticos.
Resulta inadmisible que la causa de las víctimas de desaparición y sus familiares sea utilizada como herramienta política durante las campañas electorales. La instrumentalización de esta causa con fines partidistas representa una afrenta a la dignidad de las víctimas y contraviene los principios éticos fundamentales de la política, pero, además, nada aporta a su resolución.
A un mes de los lamentables hechos de violencia en la ciudad de Morelia, Michoacán, durante la marcha conmemorativa en relación con los sucesos del 4 y 5 de abril de 2017 en la Comunidad de Arantepacua de ese estado, documentados por esta Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en la Recomendación 42VG/2020, es fundamental condenar cualquier acto que amenace la integridad física de los participantes y de aquellos ajenos a la manifestación.
Esta Comisión Nacional de los Derechos Humanos, difiere sobre el Informe de Derechos Humanos del Departamento de Estado de Estados Unidos y reitera que los derechos humanos sí se defienden institucionalmente
El derecho de asilo es uno de los derechos humanos fundamentales, porque está vinculado con el ejercicio de otros derechos humanos y sobre él se finca, no solamente la dignidad humana, sino las reglas de convivencia entre los pueblos; se trata de un acto pacífico y humanitario y, como tal, no puede ser considerado inamistoso por ningún otro Estado. Es por eso que preocupa y sorprende que ese haya sido el pretexto con el cual la noche de ayer, fuerzas armadas del gobierno de Ecuador hayan incurrido en el asalto de la Embajada de México, que además conlleva graves violaciones al derecho internacional.